Taxis y búhos, 25.01.08

En estos días parece despuntar un debate extraordinariamente activo en torno a la supuesta crisis del gremio del taxi en la ciudad de Cádiz, en apariencia agravada con la instauración del llamado “búho bus”, servicio nocturno exclusivo de los fines de semana. La intensidad del debate queda subrayada por la cantidad de intervenciones que han suscitado en la edición digital del Diario de Cádiz las noticias relativas a este asunto.
No dejan de sorprenderme los alarmantes cauces por los que discurre la mayoría de las “argumentaciones”, término que entrecomillo porque destaca sobremanera la apelación al insulto grosero muy por encima de las justificaciones razonadas. Estamos ante una situación en que el encastillamiento en posiciones solipsistas y proteccionistas por ambas partes se me antoja muy propia de este país de nuestras entretelas, acostumbrado por un lado a que determinados sectores laborales cuenten casi por consuetudinaria obligación con ayudas institucionales de las que otros carecen, y por otro a que haya parcelas de consumidores que demuestran falta de conocimiento acerca de lo que implica el uso de determinados servicios.
Los taxistas se quejan impropiamente de la competencia que al parecer les supone la existencia de un servicio público; un servicio al que los ciudadanos tienen pleno derecho en virtud de sus impuestos y cuyo funcionamiento, por otra parte, resulta de lo más sano para evitar la imposición de un monopolio en el sector del transporte (mal estaría que para desplazarnos hubiésemos de recurrir por fuerza al taxi). En el otro extremo, se encuentra el usuario que se queja de los precios del taxi, cuyo uso, en primer término, no es obligado, dado que existen más opciones, y que, en definitiva, supone una alternativa de transporte especializado que aporta al usuario una exclusividad (conductor a nuestra plena disposición) que bien está que se valore y, en consecuencia, se pague; por ello las comparaciones con las tarifas de otros medios comunes de transporte es, sencillamente, improcedente.
¿Acaso alguien puede dudar que sería óptima la pacífica coexistencia de ambas posibilidades, debidamente reguladas para ofrecer el adecuado servicio al ciudadano?

8 comentarios:

NUNCIO TAMALLANGOS dijo...

Querida Ana,
lo que dices es de lo más razonable. ¿De verdad alguien no lo entiende? En este país nuestro, lamentablemente, el único interés que parece importar es el propio.

Un beso.

Anónimo dijo...

Tendrías que leer lo vergonzosos -por insultantes- comentarios que se hicieron a la noticia por los lectores en el Diario de Cádiz, llamándose de todo entre sí ("parado", "chorizo" y otros de similar calibre).
Decididamente, querido amigo, el interés propio, como bien apuntas, parece ser el único estímulo para las palabras y los hechos.
En fin, así sEmos.
Beso grande.

Anónimo dijo...

Yo creo que son dos productos diferentes destinados a targets distintos. No entiendo el enfrentamiento, aquí los taxistas santanderinos se quejan de que hay pocas licencias y nunca les he oído quejarse del búho.

En nuestra maravillosa ciudad coger un taxi a las 3 de la mañana un día de marcha es casi imposible.¿Has cogido alguna vez un bus búho? Es toda una experiencia, un flashback tremendo lleno de olores, colores y escenas olvidables.

VOto por una cohexistencia pacífica de ambos.

Besos sobre ruedas.

Anónimo dijo...

Hermosa Miss: Espero que ya estés recuperada. Lo del bus nocturno... pues no, no me he atrevido: ya sabes que soy tímida :-)
Todos deberíamos coexistir pacíficamente, pero... eso del respeto por estos pagos no se entiende.
Besote grande.

C.C.Buxter dijo...

Me ha sorprendido bastante este artículo, porque no veo la razón de la polémica por ninguna parte. En Barcelona existe desde hace tiempo el "Nit bus" (Bus noche), que creo que opera no sólo los fines de semana sino también el resto de días, y nunca he pensado que pudiese ser un problema. Pero claro: por discutir que no sea...

Anónimo dijo...

Ay, querido mío, es que hay lugares donde algunos colectivos piensan que les deben dar la comida a la boca... y si de paso hay dicusión, mejor que mejor.

Anónimo dijo...

Si es cierto que en Cadiz se ha montado una cierta polémica por la "convivencia" del bus nocturno y los taxis, voy a terminar pensando que por aquellas latitudes el personal es raro de verdad.
Un beso de un usuario habitual de buses y taxis

Diario Cádiz dijo...

Esta información es muy interesante ya que nos muestra información muy completa y concisa gracias y sigan publicando.